Sorprendente, pero cierto. Se ha descubierto el mayor yacimiento de oro del mundo conocido, y está en el espacio. Parece increíble, casi de un programa o película de ciencia ficción, pero es algo real. Se trata de un asteroide, al cual se le ha dado el nombre de ’16 Pysche’.

Para sorpresa de sus descubridores, el valor aproximado del oro que contiene puede ascender a 10.000 cuatrillones de dólares, equivalentes a unos 1,3 billones por persona en la Tierra. Seguramente estas cifras y estos datos ya de por sí nos hayan dejado desconcertados y andemos todos intentando contar de cabeza que cantidad de dinero es esa.

El asteroide 16 Pysche y la importancia de su hallazgo

Quizá tenemos en mente en este momento las películas de nuestra niñez, o dependiendo de la edad, de nuestra juventud, donde aparecían los colonos en el oeste americano absolutamente cegados por la fiebre del oro, buscando minúsculas pepitas en el río, que cribaban sin cesar y matándose a tiros por un puñado de dólares.

Fue una forma de hacer fortuna, que se prometía sencilla y que dio lugar a un inmenso flujo migratorio hacia la California de antaño, ya que  bajo el suelo, en ríos o en mitad del desierto, había pepitas de oro que hacían perder la cabeza a cualquiera.

Centenares de familias lograron una importante fortuna tras encontrar oro, y otras muchas, perdieron la cabeza, o a  algunos de sus miembros a causa del furor desatado por esa fiebre incontenible de enriquecerse de forma fácil.

Ahora que la NASA ha descubierto este asteroide, y que ya es, oficialmente, la mayor reserva de oro del mundo conocido, ¿debemos temer por una nueva fiebre similar, o debemos sin embargo temer por la devaluación de la economía actual, basada en las reservas de oro y por ende, su colapso?

El asteroide ’16 Pysche’se encuentra entre Marte y Saturno y su composición es fundamentalmente de oro, aunque también de otros metales pesados de gran valor como es el caso del hierro o el níquel.

No es nada probable que esa ingente cantidad de oro y su riqueza llegase a nuestro planeta a ser la panacea que sacase de la pobreza absoluta a la gran mayoría de la población mundial que en estos momentos no tiene ni para llevarse agua a la boca. Todo lo contrario.

A pesar de ésta triste realidad, existe otra, por añadidura, igual de alarmante y es que un impacto en nuestro planeta acabaría con la vida. Se cree que podría ser el núcleo de un antiguo planeta desconocido que dadas sus dimensiones, un hipotético impacto tendría devastadoras consecuencias en la Tierra.

Pero no nos asustemos, nuestra realidad sigue siendo triste pero no alarmante para el primer mundo, ya que no existe ninguna prueba que sugiera que se dirige hacia nuestro planeta; así que volvamos a la fiebre del oro, igualmente destructiva, ya que la NASA ha avanzado que prevé para el verano de 2022 una misión para conocer más de cerca sus características.

No obstante lo anterior, parece que los científicos apuntan a que en la actualidad no sería posible extraer su oro y traerlo a nuestro planeta, calculando que simplemente conseguir llevar a cabo una demostración meramente teórica de cómo extraer el oro de un asteroide acarrearía un periodo de unos 25 años.

Pero el ’16 Pysche’ no es el único elemento estelar conocido con metales pesados de incalculable valor, incluso la Luna alberga importantes cantidades de oro y platino. Algo que aquí es tan valioso, el universo lo tiene por doquier, así de relativas son las cosas; y por eso, quedémonos con darle a los metales el valor que tienen en la actualidad y en nuestra realidad diaria, sin cábalas ni fiebres.

La naturaleza de la producción de estos metales en planetas, satélites y otros, sigue siendo todo un misterio, como también lo es cuánto oro existe aún en entrañas de la Tierra. No parece humanamente posible, en la actualidad, conocer cómo se produce el oro, eso de lo que nos hablan las leyendas de los alquimistas.

Existen hipótesis, como las que indican que las colisiones entre estrellas de neutrones han confirmado la fabricación de oro. Sin embargo, este tipo de reacciones son tan escasas que es improbable que sea la principal explicación sobre la existencia de oro. Se habla de supernovas, de campos magnéticos y de un sinfín de teorías más.

Pero de momento, no existen más que hipótesis, teorías y estudios que pretenden conocer de dónde y cómo surge el oro pero, de momento, continuamos con el misterio. Quizá sea mejor así, ya que si conociésemos la fórmula de producción del oro o de los más preciados metales, desconocemos qué reacciones se producirían en el mundo que ahora conocemos, porque ¿qué sería lo siguiente?