Comprar una cadena puede llegar a ser tan complicado como elegir unos lentes adecuados a tu rostro. Aunque se trata de un accesorio que se puede colocar en absolutamente cualquier tipo de cuello, esto no significa que todos los modelos sean para todo el mundo. Esto se vuelve más prominente si estás pensando en dar una cadena como un regalo para una persona especial o si tienes gustos específicos.

Por suerte, al igual que en todos los procesos de compra, existe una serie de aspectos y características que puedes tener en cuenta al comprar una cadena. Estos te ayudarán a dar con la cadena correcta para tu color de piel, gustos y contextura. Como especialistas en el ámbito de joyerías y accesorios, te damos una serie de consejos que también compartimos con nuestros clientes a la hora de elegir la cadena ideal.

Primero piensa en el tipo de cadena que quieres comprar

Actualmente existe una extensa variedad de tipos de cadenas entre los cuales elegir. De hecho, es posible que se nos haga difícil mencionarlos todos. Por otro lado, antes de proceder a comprar una cadena, te recomendamos que revises todos los mencionados a continuación. Es posible que estés pasando por alto un modelo que se adapte completamente a tu gusto, solo por desconocer de su existencia.

En primer lugar, tenemos la cadena de eslabones. Es una de las más comunes, y está compuesta por eslabones ovalados entrelazados. Podrás encontrar una gran variedad de modelos que se adapten a tus gustos. Luego tenemos la cadena de estilo fígaro que, a diferencia de la anterior, tiene eslabones de diferentes tamaños. En general, se compone por tres eslabones cortos y un largo, de grosores variados. Estas son perfectas para los clientes masculinos.

Si estás buscando comprar una cadena de aspecto más sofisticado, también puedes optar por una cadena de cordón. Su estilo se asemeja al de una cuerda, y sus eslabones se encuentran cuidadosamente entrelazados. Son de larga longitud y además uno de los modelos que está más de moda. Por otro lado, tenemos la cadena veneciana, cuyos eslabones tienen forma cuadrada. Son visualmente simétricas y ofrecen un estilo de robustez.

Además de ellas, también está la cadena de serpiente, un diseño muy peculiar. Sus eslabones se encuentran curvados ligeramente, lo cual hace a este tipo de cadena bastante llamativa. Gracias a ello, se pueden utilizar en solitario sin verse muy simple. Por último, también puedes optar por comprar una cadena de bolas. Su estilo es similar al de una cadena de perlas, pero con bolas de metal. Estas pueden ser huecas o sólidas y se unen por un cable.

Considera el peso del colgante

Ahora, independientemente del tipo de cadena, la mayoría se encuentra diseñada para poder llevar un colgante a juego. Estos los puedes adquirir de forma separada o en conjunto al comprar una cadena. Existen tres aspectos que pueden definir el peso de una cadena: el grosor, el calibre y el tipo de cierre. De hecho, cada característica se afecta entre sí. Por ejemplo, el calibre o grosor dependerá del peso y del tamaño del colgante, y viceversa.

Por ello, considera que tanto quieres que pese el colgante antes de comprar una cadena. Si quieres menos peso, opta por colgantes de menor grosos y tamaño. Un aspecto como el peso puede definir la facilidad con la que la cadena se puede romper, o el estilo y equilibrio que aporta a un conjunto.

Ten en cuenta el tipo de metal y la longitud

Una cadena de mayor longitud es la ideal para colgantes de mayor peso y tamaño. Sin embargo, lo más aconsejable es comprar una cadena de longitud corta, ya que son más cómodas y prácticas para llevar en el día a día. Por otro lado, también será necesario que consideres el material de fabricación, lo cual puede definir el precio de la cadena, la durabilidad y los colores del metal. Los más comunes son cadenas de oro blanco o amarillo y de plata.