Por lo general, las mujeres tienen dificultades para escoger sus accesorios, tanto para salidas especiales como al hacer compras. Yendo más allá de los prejuicios sexistas, esto podría deberse a que aplican estrictos criterios para discriminar sus opciones. Y si bien esto es bastante común en ellas, no podemos negar que el hombre también suele sopesar bastante al comprar un reloj.

De hecho, comprar un reloj parece una tarea simple, pero no necesariamente lo sea. Tenemos el principal aspecto, la durabilidad o funcionalidad, pero este siempre debe ir acompañado del buen gusto. A ellos podemos sumar otros varios factores que pueden incidir en la decisión de un hombre. Ya sea que quieras obsequiar o comprender la mente masculina, Joyería Gimeno los explica a continuación.

El diseño y la categoría del reloj

Los relojes para el hombre son comparables a las joyas para las mujeres. Aunque hoy todos los teléfonos son capaces de dar la hora, estas piezas siguen en las muñecas de ambos sexos. Ya que más allá de su función, constituyen un accesorio importante, que puede aludir status y otros rasgos de la personalidad de su portador. Por lo cual, el diseño y la categoría son muy importantes al hacerte con uno.

Tipo de correa: ¿de metal, cuero o de caucho?

Y hablando de diseño, la correa es uno de los puntos más importantes para un hombre que quiere comprar un reloj. Las hay de diferentes tipos, pero podemos clasificarlas de forma muy general en aquellas hechas de metal, cuero o caucho. Cualquiera de ellas puede cumplir como un elemento decorativo bien jugado, e incluso resultar funcional.

Pero aun así, la selección de una u otra influye en la imagen que el hombre quiere transmitir, ¿look deportivo, casual o más bien formal? Las correas de metal son las más adecuadas cuando el objetivo es complementar un atuendo elegante. Por su parte, las de cuero sirven más para ocasiones menos formales. Y claro está, las de caucho son más adecuadas y prácticas para los deportes.

Resistencia al agua

Por lo general, nos fijamos en cuestiones de aspecto físico, pero hay otros factores importantes a considerar al comprar un reloj. Entre ellos, la resistencia al agua, una característica que puede prolongar sustancialmente la durabilidad de la pieza. Los relojes están diseñados para funcionar al aire libre, pero los accidentes ocurren y es mejor estar preparados. Nunca se sabe cuándo se avecina un tropezón en la piscina.

La mecánica del funcionamiento: ¿electrónico, mecánico o de cuarzo?

Otra de las cosas que más valoradas por el hombre al comprar un reloj es la mecánica detrás de su funcionamiento. Y no es para menos, ya que esta definirá la calidad detrás de la pieza y, por ende, su durabilidad. En este sentido, conviene hablar de tres tipos esenciales; el electrónico, el mecánico y el de cuarzo. Todos estos ofrecen ventajas y desventajas.

Los relojes mecánicos son los más antiguos; como su nombre lo indica, su movimiento lo impulsan los engranajes y resortes que lo componen, tal y como en una película de época. Otros más modernos son los de cuarzo, que funcionan con pilas con una duración de 12 a 36 meses. Y por último, los electrónicos con procesador y pantallas que muestran la hora y otros datos de interés para el hombre.

El modelo a escoger dependerá mayoritariamente de los gustos e intereses del hombre, pero también del nivel de asesoría que reciba. Los relojes mecánicos no son los más comunes en nuestros tiempos, aunque para muchos pueden servir como artículos de colección. Sin embargo, los de cuarzo siguen siendo populares, y ni hablar de los electrónicos por su variedad de funciones.

El fabricante

Esto nos lleva al punto al que van sujetas todas las características mencionadas: el fabricante. Si bien usar el precio como referencia al comprar un reloj no es lo más adecuado, las marcas sí pueden decir mucho sobre la calidad. Con tanto tiempo al lado de los humanos, es lógico que existan muchos fabricantes experimentados y con una imagen consolidada.

El fabricante puede estar especializado en relojes clásicos mecánicos, de cuarzo o electrónicos, especialmente con función deportiva. Asimismo, su nombre puede proporcionar ideas sobre los materiales que lo componen y, por ende, de su calidad. Así que todo hombre interesado en adquirir uno probablemente tome en cuenta cada uno de estos aspectos.

El precio del reloj

Y no podíamos culminar sin mencionar el precio, un punto que, aunque no determina calidad, es muy importante para el hombre. Con ello no nos referimos a derroches o tacañería, sino al status que puede proporcionar este. Ahora bien, muchos podrían dejarse llevar por un precio elevado, pero esta no siempre es una buena referencia. Un buen reloj no siempre es excesivamente caro.